Ser nacionalista (andaluz) en esta tierra no es para nada fácil. Lo mejor para sufrir un menor número de problemas, desilusiones y frustraciones políticas es seguir a pies juntillas la senda marcada por el 'régimen' aportando para ello tu acción (o inacción), tu pensamiento (no es obligatorio) y tu voto (es obligatorio).
Pero todavía somos muchos los que cuando se nos nombra a Andalucía el corazón nos da un vuelco; somos muchos los que llevamos el amor a esta tierra en la sangre y ésta nos hierve cuando alguien la explota, la humilla o la maltrata; somos muchos los que nos dejamos el alma en intentar sacar del olvido la historia, la cultura, la identidad, y en definitiva, la esencia de Andalucía que tan manipulada, humillada, boicoteada y fagocitada está por el 'régimen'.
Todos los que sentimos esto, no sabemos bien si reir o llorar cuando vemos a dos travestis políticos como Manuel Chaves y Javier Arenas haciendo unas
declaraciones en la que se erigen como los más andalucistas del momento.
Manuel Chaves dijo que el PSOE era el partido "más andalucista", entendiendo este término como el ejercicio de hacer que Andalucía "progrese", tenga "más peso" en España y la Unión Europea, y que sus ciudadanos tengan "más derechos y bienestar".
Tras esto, uno no puede parar de hacerse preguntas: ¿por qué Andalucía entonces sigue supeditada a los designios que provienen de la calle Ferraz de Madrid?, ¿por qué se han usado todos los años Andalucía para atacar únicamente al PP y no para defender los intereses andaluces?, ¿por qué Andalucía sigue teniendo un peso específico mínimo en España y en la Unión Europea en comparación con otras comunidades autónomas?, ¿por qué sólo se habla de lo que exigen Cataluña, Pais Vasco o Madrid pero de Andalucía nunca escuchamos nada?, ¿por qué Chaves no alza la voz cuando los recursos se distribuyen desigualmente y Andalucía siempre sale perjudicada?, ¿por qué en ninguna escuela o universidad andaluza se estudia Historia de Andalucía?, ¿por qué es más fácil encontrar en Andalucía el 'Mein Kampf' de Adolf Hitler que el 'Ideal Andaluz' de Blas Infante?, ¿por qué nadie sabe nada de, según nuestro estatuto, el Padre de la Patria Andaluza?, ¿por qué en la radio y televisión públicas de Andalucía nadie habla andaluz?
Javier Arenas, por su parte, apeló a un supuesto "andalucismo español", que tiene sus bases, según él, en las Cortes de Cádiz de 1812, la Constitución Española y las tres décadas de democracia.
Los andalucistas de corazón ningún segundo debemos perder en analizar o discutir esta acción mental 'masturbatoria' del señor Arenas. Una buena respuesta a estas ridículas afirmaciones es la que Julián Álvarez (Coalición Andalucista) le ha dedicado al candidato popular:
"Son herederos de la derecha que gobernó cuarenta años, son herederos de esa derecha que fusiló a Blas Infante en la carretera de Carmona y la que sigue llamándole necio en estos días"En cualquier caso, no debemos olvidar que tanto la derecha de siempre (PP) y la nueva derecha (PSOE) son dos caras de la misma moneda, y que en realidad, lo único que quieren es disfrazarse con un falso andalucismo. Un andalucismo que no sienten ni llevan dentro. Sólo se trata de un producto de puro márketin político. A la hora de la verdad y en el día a día, tanto PP como PSOE, seguirán estando lejos de la defensa a ultranza de los intereses andaluces.