Es obligacion moral, sobre todo de los que padecen la guerra, cuando se acabe como nosotros queremos que se acabe, sacar de la leccion y de la musa del escarmiento el mayor bien posible, y cuando la antorcha pase a otras manos, a otros hombres, a otras generaciones, que se acordaran, si alguna vez sienten que les hierve la sangre iracunda y otra vez el genio español vuelve a enfurecerse con la intolerancia y con el odio y con el apetito de destruccion, que piensen en los muertos y que escuchen su leccion, la de esos hombres, que han caido embravecidos en la batalla luchando magnanimamente por un ideal grandioso y que ahora, abrigados en la tierra materna, ya no tienen odio, ya no tienen rencor, y nos envian, con los destellos de su luz, tranquila y remota como la de una estrella, el mensaje de la patria eterna que dice a todos sus hijos: Paz, Piedad y Perdon.
Manuel Azaña. Barcelona. 18 Julio 1938
Es antiguo pero me apetecia ponerlo, si las personas se molestaran mas en conocer su historia a todos nos iria mucho mejor.
Jesús
|